La tirolesa de Hoonah es de alta tecnología, pero las emociones que evoca son primarias. La plataforma es alta, a 395 m (1300 pies). Se mira al frente e irremediablemente hacia abajo, más abajo, más abajo. Todo se ve muy lejos, muy pequeño... la anticipación crece a medida que se abren los seguros... y de repente, la puerta por fin está abierta... ¡¡Aaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhh!!

The zip-line in Hoonah is high tech, but the emotions it evokes are primal. The platform is high, 1300 feet. You look out, and down, down, down. Everything is so far away, so small... Anticipation grows as each set of zippers flies off... so fast... And then the gate opens for you... Aaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Photographer: Bill Eichenlaub