Antes de los días de las boyas de plástico, a veces se utilizaban bolas de vidrio para suspender las grandes redes de pesca. Al parecer, la mayoría de las bolas encontradas en Alaska, provienen de barcos de pesca japoneses. Ésta foto muestra una justo donde se encontró, en la costa exterior y con Fairweather Range (la cordillera Fairweather) al fondo. Su superficie parece pulida con chorro de arena, y su fondo está cubierto por restos de percebes. Parece un milagro que haya sobrevivido tantos años, tal vez haya pasado décadas a la deriva en el norte del Pacífico, antes de terminar en esta solitaria playa de arena. Fotógrafo: Bill Eichenlaub