En Glacier Bay, no hay muchos especímenes de cedro amarillo. Los pocos que aún existen son remanentes del bosque que no fue alcanzado por el hielo durante la "pequeña edad de hielo" que terminó hace unos cientos de años. Esta rama de cedro amarillo parece intentar alcanzar la cornácea canadiense en flor de la parte superior de la fotografía. Prácticamente puedo oler el penetrante y dulce aroma de la ciénaga, cuando miro esta imagen.

There are not many stands of yellow cedar in Glacier Bay. The stands that do persist are remnants of forest that were not overtaken by ice during the ‘little ice age’ which ended a few hundred years ago. This yellow cedar branch seemed to be reaching out to the flowering dwarf dogwood in the top of the frame. I can almost smell the sweet and pungent smell of muskeg when I look at this image. Photographer: Sean Neilson