ある夏の暑い日に、長時間坂を登り続けてこの高い地点に辿り着き、皆疲れ切ってそれぞれ自分の好きなところを見つけて休憩していました。突然の「クマが来た!」との声に急いで起きてみると、アメリカグマが小丘を越え、こちらに向かって走ってくるではありませんか。立ち上がってみると、クマは丁度、叫ぶ我々三人の三角形に囲まれた状態になり、少々ストレスを感じているように見えました。そこで、私たちは叫ぶのを止めて静かにし、クマ撃退スプレーを取り出し、万が一に備えて構えました。クマは私から4メートル半ほどのところをのんびりと通り過ぎ、斜面の茂みに入り込み、ブルーベリーを食べ始めました。友人の一人がこちらにやってきて「寝てたんだよな。夢見ながら。で、目が覚めたらクマの顔がすぐ上にあったんだ。」と言いました。「で、どうした?」「飛び起きて、大声を上げた。」この話をアラスカの友人にすると、皆友人の友人がクマに顔をなめられている時に目が覚めたなどという話をします。そして、やはり飛び起きて、生き延びたのだと。皆、無意識にそう反応するのでしょうか。
在爬坡爬了漫长又炎热的一天后,我们都在这个岛上瘫倒了,每个人呆在自己田园般的小角落里。突然我听到一声高喊,“熊!在朝你们走过来!”我们赶紧站起来,果然有一头黑熊跑上了一个小山丘,从喊叫的那个方向跑来。这头熊看起来有点紧张,因为它发现自己处在不断喊叫的人所形成的一个三角形中心。但是我们安静了下来,并且很快地将防熊喷雾剂准备好。它悠哉游哉地从我旁边走过,跟我之间估计有15英尺(4.6米)的距离,然后这头熊走进了山坡上的灌木丛,开始吃蓝莓。Sean(肖恩)走下来说,“我在睡觉,正在做梦呢,然后醒来发觉,那头熊的脸就在我上方一英尺(30.5厘米)!”呀!“你做了什么?”“我跳了起来,然后开始大喊大叫!”当我们把这个故事告诉我们在阿拉斯加的朋友的时候,他们也必然会给我们讲述他们的朋友的朋友的故事,那人如何醒来的时候发现一头熊正在舔他们的脸。他们也跳了起来,而且也得以逃生。看来这种做法是标准的自然而然的反应...
Tras un largo y caluroso día de escalada, nos desplomamos en esta isla; cada uno en su pequeño rincón idílico. De repente, oímos un grito: "¡Un oso! ¡Se dirige hacia ustedes!" Nos pusimos en pie rápidamente y, en efecto, un oso negro se encontraba sobre una pequeña planicie, corriendo desde donde se escuchó el grito. Parecía un poco estresado de encontrarse en el centro de un triángulo de vociferantes seres humanos. Pero dejamos de gritar y rápidamente sacamos el atomizador para osos. Pasó a unos escasos 5 metros (15 pies) de mí, se dirigió a los arbustos de la ladera, y se puso a comer arándanos. Sean bajó y dijo: "¡Estaba durmiendo y me he despertado con la cara del oso a medio metro de mí!" – “¡Huy! ¿Y qué hiciste?"- le pregunté. -¡Levantarme de un salto y ponerme a gritar!- respondió. Siempre que contamos esta historia a nuestros amigos de Alaska, es inevitable que alguien salga con un relato sobre cómo el amigo de su amigo se despertó con un oso lamiéndole la cara. Todos ellos también dieron un brinco y sobrevivieron. Al parecer, esta es la reacción normal e involuntaria...
After a long hot day of uphill we collapsed on this island, each of us to his own little idyllic corner. Suddenly I heard a shout, “Bear! Comin’ at you!” We scrambled to our feet and sure enough a black bear topped a little hummock, running from the direction of the shout. It was looking a little stressed as it found itself in the center of a triangle of shouting humans. But we quieted down and quickly got the bear spray ready. It sauntered past me with a good 15 feet to spare, went into the shrubs on the hillside and started eating blueberries. Sean came down and said, “I was asleep, dreaming, and woke up with the bear’s face a foot above me!” Yikes! “What'd you do?” “Jumped up and started yelling!” When we tell this story to our Alaskan friends they inevitably bring up the story about their friend’s friend who woke up with a bear licking their face. They jumped up, too, and survived. Seems to be the standard, involuntary reaction... Photographer: Bill Eichenlaub